Disfrutar de una deliciosa comida no solo depende de los ingredientes y la preparación, sino también de cómo se presenta en el plato. El tamaño y la forma del plato pueden influir en nuestra percepción de los sabores y en la experiencia de comer. En este artículo, exploraremos las diferentes medidas de los platos y cómo elegir el adecuado para cada tipo de comida.
¿Cuánto mide un plato normal de comida?
Un plato normal de comida, también conocido como plato llano, generalmente tiene un diámetro de 25 a 28 centímetros. Esta medida es ideal para servir platos principales como carnes, pescados, pastas y arroces. El tamaño más común de un plato normal es de 26 centímetros, lo que proporciona suficiente espacio para una porción adecuada de comida sin que se vea demasiado vacío.
¿Cuánto mide un plato llano grande?
Si deseas servir porciones más generosas o platos que requieren más espacio, como las ensaladas, puedes optar por un plato llano grande. Este tipo de plato tiene un diámetro de 30 a 32 centímetros, lo que permite colocar una mayor cantidad de alimentos sin que se vea abarrotado. Un plato llano grande es perfecto para ocasiones especiales o para cuando deseas impresionar a tus invitados con una presentación elegante.
¿Cuánto debe medir un plato bajo?
Los platos bajos, también conocidos como platos de postre, generalmente tienen un diámetro de 19 a 22 centímetros. Estos platos son más pequeños que los platos llanos y se utilizan para servir postres, como tartas, helados o frutas. Al ser más pequeños, los platos bajos ayudan a controlar las porciones y a mantener el equilibrio entre los sabores dulces y los demás elementos del postre.
¿Cuánto mide el plato de pan?
El plato de pan es un elemento indispensable en la mesa, especialmente durante las comidas formales. Este tipo de plato suele tener un diámetro de 15 a 17 centímetros y se utiliza para servir rebanadas de pan individuales. Al ser más pequeño que los platos normales, el plato de pan ayuda a mantener el orden en la mesa y evita que las migas se dispersen por todo el mantel.
Medidas de un plato hondo
Los platos hondos son ideales para servir sopas, guisos y otros platos líquidos.
Estos platos tienen una forma más profunda y su diámetro varía de 20 a 24 centímetros. El tamaño de un plato hondo puede variar dependiendo del tipo de comida que se vaya a servir. Por ejemplo, un plato hondo para una sopa puede ser más pequeño que un plato hondo para un guiso. La forma y el tamaño de un plato hondo permiten contener el líquido sin que se derrame y facilitan el uso de la cuchara para disfrutar de cada bocado.
Consejos para elegir el tamaño adecuado del plato
A la hora de elegir el tamaño adecuado del plato, es importante tener en cuenta el tipo de comida que se va a servir y la porción que deseas ofrecer. Aquí te dejamos algunos consejos para ayudarte a tomar la decisión:
Considera el tipo de comida
Si vas a servir platos principales como carnes, pescados o pastas, opta por un plato normal de 25 a 28 centímetros de diámetro. Si vas a servir ensaladas u otros platos que requieren más espacio, elige un plato llano grande de 30 a 32 centímetros de diámetro. Para postres, utiliza un plato bajo de 19 a 22 centímetros de diámetro.
Piensa en la presentación
El tamaño y la forma del plato pueden influir en la presentación de la comida. Si quieres destacar los colores y texturas de los ingredientes, elige un plato que permita que se vean claramente. Si buscas una presentación más minimalista, elige un plato más pequeño que no abarrote la comida.
Controla las porciones
Utilizar platos de diferentes tamaños puede ayudarte a controlar las porciones y evitar servir demasiada comida. Si deseas controlar las porciones de los platos principales, utiliza un plato normal de tamaño estándar. Si quieres disfrutar de un postre sin excederte, utiliza un plato bajo que limite la cantidad de comida que puedes servir.
Ten en cuenta el espacio disponible
Antes de elegir el tamaño del plato, considera el espacio disponible en la mesa y en tu cocina. Un plato demasiado grande puede abarrotar la mesa y dificultar la circulación, mientras que un plato demasiado pequeño puede hacer que la comida se vea desproporcionada.